
Erika Ivonne Ortiz Becerril
Jueza de Distrito del Tribunal Laboral Federal de Asuntos Individuales con residencia en San Luis Potosí
“Debemos despejar temores, inseguridades y canalizar todo de manera positiva, incluidas las críticas destructivas.”
Licenciada en Derecho y en Contaduría Pública, Especialidad en Derecho del Trabajo y Justicia Laboral por la Escuela Federal de Formación Judicial, Especialidad en Derecho Penal y Derecho de Amparo por la Universidad en Estudios de Posgrado en Derecho.
Ha ocupado los cargos de Secretaria Ejecutiva del Primer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Tercer Circuito, Secretaria Proyectista del Primer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Tercer Circuito y Segundo Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito, Jueza de Distrito del Tribunal Laboral Federal de Asuntos Individuales con residencia en San Luis Potosí y Directora Regional del Noveno Circuito de la JUFED.
Liderazgos que me inspiran
Me inspira el liderazgo de mi madre por la capacidad que tiene de influir y motivar mi vida, a lo largo de los años me ha inspirado en todo. Además, Angela Merkel rompió todas las barreras, fue la primera mujer que asumió la cancillería del gobierno alemán y escuchó a sus oponentes políticos. Un hombre en su posición difícilmente lo hubiera hecho, sobre todo si sus contrincantes hubieran sido mujeres.
Barreras de género que he roto
Durante mi periodo como Secretaria Proyectista en un Tribunal Colegiado de Circuito, un titular varón expresaba objeciones a los proyectos que presentaba, de manera personal y no por el conducto correspondiente. Con el tiempo advertí que su actitud tenía la intención de denostar mi trabajo debido a mi corta edad y mi género, ya que no ocurría lo mismo con mis compañeros del sexo masculino y en las mismas circunstancias de edad e inexperiencia. Al darme cuenta, se fortaleció mi seguridad, entendí que no debía sentirme culpable por la falta de experiencia, que todo era un aprendizaje a largo plazo y sobre todo que ser mujer no determinaba la superioridad de mis compañeros en lo profesional.
Retos de las abogadas en la actualidad
Uno de los retos que debemos superar las abogadas es la desconfianza en nuestra capacidad para desempeñar un cargo o llevar un caso cuando la persona a representar es un varón. Otros retos son el escrutinio al que estamos expuestas por ser mujeres, abogadas, hijas y madres; los comentarios destructivos del propio género; la sobrevaloración de los atributos masculinos; y el silencio de la sociedad ante la discriminación que sufrimos las mujeres en general.
Libro que me ha marcado
La ciudad de las damas, de Christine de Pizan, publicado en el siglo XV, nos muestra ejemplos de liderazgo femenino y se visibiliza un reclamo para que las mujeres sean reconocidas y tengan un lugar en el mundo, en un contexto histórico donde los derechos de las mujeres no eran considerados. Después de varios siglos, hoy en día tenemos la oportunidad de acrecentar ese reconocimiento y lograr un mejor posicionamiento.